Monday, April 13, 2009

La Eucaristía

Sin la fuerza que viene de la Eucaristía no se puede vivir ninguna vida eucarística.
Pensar lo contrario, que sin Eucaristía, sin participación activa, viva de la Misa, sin adoración al Santísimo se puede lograr cualquier cosa es simple voluntarismo. El Señor ha dicho: sin mí nada podréis. En la Eucaristía, Jesús nos habla. Te llena de paz, de serenidad, de esperanza. No podría vivir sin la Eucaristía definitivamente, y me encantaría asistir más a menudo a la misma. Salgo totalmente renovada y llena de fe y confianza en el Señor, segura de su total y absoluta protección y guía, para mí y para los míos. (comentario de un usuario de Facebook)